Los principales partidos españoles aguardan el escrutinio de las elecciones italianas que se celebran este domingo con temores, alguna esperanza y silencios prudentes y conscientes de la posible victoria de una coalición liderada por los Hermanos de Italia de Georgia Meloni.
Los silencios confesos los protagonizaron curiosamente, los dos grandes partidos, el PSOE y el PP, que probablemente por la posibilidad de que les toque gobernar España y tratar con el Ejecutivo italiano en los foros internacionales rehusaron hacer juicios previos sobre los comicios a preguntas de Servimedia.
Fuentes del PSOE emplazaron al momento en que se conozcan los resultados definitivos para hacer alguna valoración, mientras que los populares, en el mismo sentido, se negaron a «hacer previas» y se conformaron con atestiguar que siguen las elecciones «con mucho interés al tratarse de un país vecino y una de las economías más importantes del euro», aspecto en el que coinciden con los socialistas.
No obstante, el presidente del Gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez, envió «fuerza y coraje» al líder del Partido Demócrata (PD) italiano, Enrico Letta, en el cierre de campaña, ante la cita de hoy, donde «Italia está llamada a una elección muy importante», porque, «cuando hay elecciones, la alternativa es siempre clara: o avanzamos, o retrocedemos».
En este sentido, Sánchez afirmó que «hay que avanzar en derechos y libertades, hay que avanzar hacia una respuesta socialmente justa a las consecuencias económicas de la guerra de Putin en Ucrania». «Y todo esto, el avance en derechos y libertades, también en una respuesta justa a las crisis económicas provocadas por la guerra y la pandemia que aún tenemos que superar, lo representa el Partido Democrático y Enrico Letta», indicó el presidente español.
Fuera del PSOE y el PP, uno de los diputados de Vox que tiene un mayor conocimiento de Italia, al ser consultado por esta agencia, afirmó que a su partido puede beneficiarle el que Meloni, que participó en la campaña de esta formación para las últimas elecciones andaluzas, sea la próxima primera ministra de Italia.
«Siempre viene bien que se vea que puede gobernar un partido así», comentó, aunque no alberga muchas esperanzas de que Meloni pueda consolidarse como primera ministra por ser la candidata y líder de una formación antisistema.
COMO A BERLUSCONI
Su vaticinio es que la Comisión Europea presionará a los dos socios de Hermanos de Italia, el Forza Italia de Silvio Berlusconi y la Lega de Matteo Salvini, para que la saquen del Gobierno en menos de un año, como ya hizo en su día con el propio Berlusconi.
En Unidas Podemos, por su parte, uno de los referentes en política internacional del grupo confederal señaló a Servimedia que las elecciones italianas «son un doble toque de atención importante para España». Por un lado, porque «recuerda que los partidos reaccionarios pueden llegar al poder y desde él acabar con derechos fundamentales».
Por otro, porque, simétricamente, la victoria que se espera de la derecha «supone una interpelación a todas las fuerzas progresistas: si gobernamos con templanza y acudimos a las elecciones fragmentados, la derrota está asegurada».
En definitiva, este diputado alerta del peligro de que «el lunes Italia despierte con uno de los gobiernos electos más derechistas de Europa», pero, si así ocurriera, subrayó que el español «tiene que ocupar el espacio que deje Italia y ser un referente en ampliación de derechos y protección de los más vulnerables».
Finalmente, uno de los miembros de la dirección de Ciudadanos, también consultados por esta agencia, teme que Italia entre en una espiral antieuropea con un Gobierno presidido por Meloni, que, además, conectaría con una tendencia no tan europeísta, a diferencia de España.
Ante esta perspectiva, su esperanza es que una economía fuertemente dependiente de las exportaciones como es la italiana no permitiría a un Ejecutivo liderado por Hermanos de Italia llevar a la práctica las excentricidades que sí expresa retóricamente. «Los partidos extremistas, cuando llegan al Gobierno, se dan cuenta de que hay cosas que no pueden hacer», observa.
(SERVIMEDIA)
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