La prevalencia de obesidad infantil es mayor entre la población de 8 a 12 años (15,6%) y los niños (14,9%) y solo el 37% de la población infantojuvenil alcanza un nivel “alto” de adherencia a la dieta mediterránea, mientras que un 12% ya presenta un nivel bajo. Asimismo, los menores matriculados en centros educativos con una menor renta media por persona presentan un “mayor nivel de obesidad”.
Así lo desvela el informe ‘Pasos 2022-2023’ de la Gasol Foundation, cuyos principales resultados fueron presentados este miércoles en una rueda de prensa en la que participaron la directora ejecutiva de la fundación Cristina Ribes; la directora de la Fundación Probitas, Anna Veiga; la directora de la Fundación FCBarcelona, Marta Segú; el investigador sénior del Hospital del Mar Research Institute y coordinador del grupo 30 del Ciberesp, Helmut Schröder y el investigador principal del estudio, Santi F. Gómez.
Según el informe, en general, mientras que el nivel de obesidad y sobrepeso “se mantiene” en la población de 8 a 16 años en España, las variables de hábitos de alimentación, uso de pantallas, horas de sueño, actividad física, bienestar emocional y calidad de vida “empeoran” y muestran un “deterioro” respecto a la primera edición del estudio, que se presentó en 2019.
En este sentido, la investigación advierte de que los hábitos saludables “retroceden” en la infancia respecto al 2019, “especialmente” entre los niños en situación de vulnerabilidad, y de que el estado de salud de la infancia y, “por tanto, de la sociedad, ha empeorado en los últimos tres años”.
Los resultados principales de ‘Pasos’, que amplían las conclusiones preliminares presentadas en enero por el presidente de la Gasol Foundation, Pau Gasol, y la entonces ministra de Sanidad, Carolina Darias, confirman que la “pandemia” de obesidad infantil afecta “en mayor medida” a aquellos niños y adolescentes que viven en situación de vulnerabilidad socioeconómica, dado que un 6,7% más de la población infantojuvenil matriculada en centros educativos ubicados en una sección censal con una menor renta media por persona y año presentan obesidad.
PREOCUPANTE TENDENCIA
Una “preocupante tendencia”, según la fundación, que también se aprecia en el caso de la obesidad severa, que crece “ligeramente” en los entornos con un mayor porcentaje de pobreza infantil, mientras que en aquellas áreas con menor pobreza infantil se reduce.
“Así, se confirma que en el corto periodo evaluado existe una tendencia al incremento de las desigualdades sociales con relación a las condiciones más extremas de la obesidad infantil”, afirmó la fundación.
Por lo que se refiere a la alimentación, el informe alerta de que el nivel de adherencia a la dieta mediterránea retrocede respecto al 2019 hasta los 6,48 puntos en una escala de -4 a 12 puntos. Solamente un 37% de la población infantojuvenil alcanza un nivel “alto” de adherencia a la dieta mediterránea, una reducción de más de tres puntos respecto al curso 2019-2020, mientras que un 12% ya presenta un nivel bajo, con un incremento de casi dos puntos con relación a dicho curso, y el “deterioro” en los hábitos de alimentación también es “mayor en la población de menor nivel socioeconómico”.
En el caso de la actividad física, el promedio de minutos dedicados a la práctica de actividad física “moderada o vigorosa” ha disminuido en 7,4 minutos para el género femenino y en 7,1 para el masculino respecto al 2019-2020, lo que significa una reducción de unos 50 minutos semanales. Dicho deterioro es “superior” en los entornos con un mayor porcentaje de pobreza infantil, ya que implica una disminución promedio de casi 14 minutos al día menos de actividad física moderada o vigorosa, casi 100 minutos a la semana.
BIENESTAR EMOCIONAL
Junto a ello, los resultados principales del estudio indican que un 32,2% de niños y adolescentes declara tener “problemas” en relación al bienestar emocional, cuando dicho porcentaje se situaba en un 19,8% en 2019, y este crecimiento es más acentuado para el género femenino (alcanzando el 40% en el 2022-2023 el porcentaje de las niñas y adolescentes que se muestran “tristes, infelices o preocupadas”), en la población adolescente (42,4%) y en la de mayor pobreza infantil (30,1%).
Al mismo tiempo, en los últimos tres años la percepción de los niños de su propio estado de salud se ha deteriorado “considerablemente”, según el informe, disminuyendo en más de seis puntos (en una escala de 0 a 100) y la bajada alcanza casi los nueve puntos para la población de menor nivel socioeconómico, tanto según el nivel de renta media por año como según nivel de pobreza infantil.
Respecto al uso de pantallas, el promedio durante la semana es de 193,9 minutos de promedio al día y en fines de semana, de 288,4 minutos, cifras que superan los datos del 2019-2020, cuando, según el estudio, “la situación ya era preocupante”.
En cuanto a horas de sueño, casi la mitad de los niños y adolescentes en España no cumplen con las recomendaciones de horas de sueño diario tanto entre semana como el fin de semana y el porcentaje de “incumplimiento” es mayor entre las participantes de género femenino (47,6%) de lunes a viernes.
PLAN NACIONAL
Ante esta realidad, la Gasol Foundation insistió en la importancia de seguir “impulsando” las 200 medidas del Plan Estratégico Nacional para la Reducción de la Obesidad Infantil, que, a su entender, deben abordar esta problemática con “una mirada holística, que incluya la promoción de la actividad física, la alimentación, las horas de sueño, la reducción del uso de pantallas y la promoción del bienestar emocional y la calidad de vida”.
“A su vez, conviene poner freno al incremento de las desigualdades sociales en salud que este informe ‘Pasos 2022-2023’ hace evidentes”, advirtió la Gasol Foundation, cuya directora ejecutiva, Cristina Ribes, aseguró que “estamos frente a una situación extremadamente preocupante, con graves consecuencias a corto, medio y largo plazo”. “Estamos viviendo un deterioro acelerado de los hábitos de vida de los niños y niñas, especialmente entre aquellos que viven en situación de vulnerabilidad socioeconómica”, apostilló.
En la misma línea, el director global de Investigación y Programas de la Gasol Foundation e investigador principal del estudio, Santi F. Gómez, recordó que la obesidad infantil “es un reto complejo, que afecta a toda la sociedad”. “Debemos hacer un esfuerzo decidido, contundente y multisectorial para frenar esta problemática social que va mucho más allá de la salud pública”, abundó, convencido de que prevenir y reducir la obesidad infantil “significa dotar de oportunidades a los niños y niñas para crecer de forma saludable, y avanzar, así, en 14 de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible que están impactados por la obesidad”.
El informe ‘Pasos 2022-2023’ contó como colaboradores principales con la Fundación Probitas y Fundación FCBarcelona y fue posible también gracias a los “aliados saludables” Santander, IFA y Laureus, a los 14 grupos de investigación de toda España, y al “apoyo” de varias consejerías de educación y sanidad de distintas comunidades autónomas.