El primer presidenciable que avaló el denominado «albertismo», fue el actual embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, quien casi no ejerce esa función en el país vecino, sino que está en campaña en distritos del Conurbano bonaerense y en los medios de comunicación. Su máximo operador, Alberto Pérez (ex jefe de gabinete del ex motonauta cuando fue gobernador), visita asiduamente Casa Rosada y mantiene contacto permanente con la mesa, cada vez más chica, del jefe de Estado para intentar torcer el brazo a las intenciones del kirchnerismo, que esperan que la senadora Kirchner bendiga al dúo que jugará a nivel nacional y en la Provincia de Buenos Aires.
Hasta ahora están en danza, el actual gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y el ministro del Interior, Eduardo de Pedro. De todos modos, hasta ahora esos nombres son especulaciones, ya que el tercero en discordia, es Massa, a quien cada vez se le complican más sus aspiraciones a ocupar el sillón de Rivadavia, debido al agravamiento de la crisis económica.
«Me tomé el tiempo necesario para decidir, consulté con muchos compañeros y creo que una candidatura como la mía puede interpelar a un sector del Frente de Todos», expresó Rossi.
En otro orden de cosas, garantizó que si llegara a ganar las elecciones, una de sus principales medidas sería llevar adelante una reforma judicial: «Si soy Presidente no me gustaría gobernar un día con los cuatro integrantes de la Corte. Hay un proyecto de ley para ampliar, si ganamos las elecciones vamos a tener los votos en el Congreso. Hay que trabajar fuertemente para generar las condiciones para que estos cuatro señores se vayan, no se puede gobernar con personajes que te ponen trabas permanentemente y que son parte del partido judicial», manifestó.
A la vez, hizo hincapié en otra de las cuestiones centrales de la economía argentina, al aseverar que «el acuerdo con el FMI tiene que estar permanentemente en negociación» y que «hay que sentarse y revisar cuáles son las metas posibles para llevarlo adelante».
El otro dirigente cercano a la vicepresidenta CFK, que está en carrera es el titular del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), Juan Grabois, quien, de todos modos, antes de lanzarse advirtió que si el elegido es «Wado» de Pedro, él se bajaba y apoyaba esa postura.
Juan Pablo Peralta, periodista acreditado permanente en Casa Rosada y el Parlamento Nacional Argentino.