Autoras latinoamericanas por Pilar Iglesias
En este tiempo de verano, la ruptura de la rutina cotidiana, los periodos vacacionales, las horas en una tumbona al sol o a la sombra, las largas horas de luz… parecen facilitar la lectura. Y, por ello, aprovecho para invitaros a conocer (o reencontraros) este verano con algunas magníficas escritoras de diferentes países de América Latina, cuyas obras son fácilmente accesibles en nuestro país.
Se trata de autoras que merecen contarse entre las voces más importantes de la literatura de sus países, y de la literatura en lengua castellana en general. Autoras que unen a su calidad literatura, la riqueza de su lenguaje, su capacidad creativa y su originalidad, el abordaje crítico de temáticas candentes, y la denuncia de injusticias y violencias de nuestro mundo actual. Autoras que presentan, a través de sus protagonistas y tramas narrativas, las diferentes discriminaciones y violencias que afectan a las mujeres por la construcción social machista y patriarcal, junto con otros factores tales como las profundas desigualdades sociales y geopolíticas, la explotación económica, el racismo, la xenofobia, los conflictos armados o los abusos de los regímenes dictatoriales, ofreciendo un retrato de la historia actual de sus países.
Haré referencia a una autora harto conocida y a algunas voces, que quizás os resulten nuevas, y cuya lectura merece indudablemente la pena. En primer lugar, las dos últimas novelas de la escritora chilena Isabel Allende: Violeta (2022) y El viento conoce mi nombre (2023). En Violeta recorremos la historia de Chile a lo largo del siglo XX, entrelazada con el devenir de una mujer, que, pese a los abusos y violencias de que es objeto, es capaz de mostrar una enorme capacidad de superación y una inteligencia práctica hasta el fin de su vida. En El viento conoce mi nombre, quien sufrió el exilio por el golpe militar y posterior dictadura chilena, nos muestra el rostro de la violencia que suponen los exilios y migraciones, a través de las historias paralelas, pero separadas por ochenta años de distancia, de un niño judío que huye del Holocausto y una niña que emigra de El Salvador con su madre buscando refugio en Estados Unidos.
También aborda el tema de la migración por motivos económicos y políticos, y las estrategias a que en ocasiones las personas se ven abocadas a recurrir, la autora venezolana Karina Sainz Borgo, una voz fresca, en cuya segunda novela podemos percibir características del denominado realismo mágico. Os recomiendo su primera novela, La hija de la española (2019), que obtuvo los premios Grand Prix de l’Heroïne Madame Figaro y el International Literary Prize y la segundo, El Tercer País (2021), narrativa de la odisea de las personas que huyen de la peste (sea ésta real o figurada), que la consagra como una de las mejores escritoras latinoamericanas de la actualidad.
La fuerza y originalidad de la argentina Dolores Reyes tampoco puede dejarnos indiferentes. Ha publicado dos novelas: Cometierra (2019) y Miseria (2023), que da continuidad y supera a la primera. Reyes aborda los feminicidios, expresión extrema de la violencia contra las mujeres, combinando elementos profundamente realistas con otros de carácter mágico.
Por último, tan solo citar otros nombres, como los de la ecuatoriana Fernanda Ampuero y sus colecciones de relatos Pelea de gallos (2018) y Sacrificios humanos (2021), o la chilena Lina Meruane, autora de las novelas Fruta podrida (2007), Sangre en el ojo (2012) y El sistema nervioso (2018). Sobre ellas volveremos en futuras crónicas.
Buena lectura y feliz verano.
Enviado por José Antonio Sierra