El fallecimiento de… Mario Vargas Llosa nos ha cogido de sorpresa a todos los que amamos la literatura universal, habiendo obtenido el Premio Nobel de Literatura en el año 2010, quizá un poco tarde y cuando contaba 50 años de edad. Sus obras hablan de él: Conversación en La Catedral, La casa verde, La ciudad y los perros…Partió de esta tierra del- ‘Dios de todas religiones’-, cuando contaba 89 años de edad y en la ciudad de Lima, capital del Perú.
Su obra literaria le sobrevivirá como siempre ha pasado con los grandes escritores que en el mundo han sido: Con sombras y luces, con luces y sombras…, muchas más luces que sombras…Murió en compañía de su esposa, Patricia Llosa y su familia en general. Sus restos mortales serán incinerados, por voluntad expresa del finado… Conversación en La Catedral, la cual fue publicada en el año de 1969, es considerada como una de las grandes novelas de la historia Universal…
Tampoco podemos olvidar lo que el finado dejó escrito: “Los latinoamericanos somos soñadores por naturaleza y tenemos problemas para diferenciar el mundo real y la ficción. Es por eso que tenemos tan buenos músicos, poetas, pintores y escritores, y también gobernantes tan horribles y mediocres”. Terminó diciendo: “Si la literatura dejará de existir, para mí sería la muerte”.
Todos sabemos el interés que tuvo por la política, habiéndole proporcionado infinitas frustraciones, muy al contrario que el mundo de la cultura donde destacó con enormes éxitos. Recordamos, como no puede ser de otra manera, que en 1990 se presentó a las elecciones en Perú con ‘Movimiento y libertad’, habiéndolas perdido frente al desconocido por aquel entonces Alberto Fujimori.Quizá la literatura no cure acontecimientos pasados, pero ayuda a comprender-infinidad de veces-que salgan los documentos secretos de cada pueblo, capital o nación…Para bien de muchos y no pocos autores comprometidos para llevar a cabo muertes, asesinatos y exterminios, que ya fueron pactados de antemano. Las semillas de la violencia están servidas para llevarlas a la práctica en cualquier momento.
Nunca debemos olvidar que el finado fue...»Un soñador para un pueblo, que iluminó la lengua española en el mundo entero». ¡Descanse en Paz!
La Coruña, 14 de abril de 2025
©Mariano Cabrero Bárcena es escritor
