Vivir en un entorno virtual a través de tu personaje o avatar. Asistir a un concierto virtual, hacer un viaje a través de internet, comprar y probarse ropa digitalmente. Estudiar, trabajar y hasta enamorarse…sí, esto sucede en el nuevo universo paralelo. Metaverso es parte del futuro, pero ya es parte del presente. Pero... ¿Qué es el metaverso?
Sin duda alguna el término “metaverso” parece estar en todas partes. Probablemente, sea una de las palabras que más interrogantes y búsquedas ha generado desde que Mark Zuckerberg cambió el nombre de Facebook por Meta, y así confirmó su apuesta por esta nueva evolución tecnológica.
La etimología de las palabras suele ser un gran aliado para entender conceptos y esta oportunidad no sería la excepción. El término “metaverso” está compuesto por ‘meta’, que proviene del griego y significa “después” o “más allá”, mientras que ‘verso’ hace referencia a “universo”. Es decir, nos referimos a un universo que está más allá del que conocemos actualmente. En este caso, es un nuevo entorno virtual tridimensional al que se puede entrar, en lugar de mirar una pantalla. Básicamente es un mundo infinito de comunidades virtuales interconectadas en el que las personas pueden reunirse, estudiar, trabajar, viajar, jugar, comercializar, entre muchas otras opciones.
El metaverso es un evolucionado mundo virtual. Es la forma de nombrar a aquellos entornos inmersivos que nos permiten acceder a nuevas experiencias interactivas. A través de dispositivos de realidad virtual, gafas de realidad aumentada, aplicaciones en smartphones y otros complementos, nos conectamos a la virtualidad y nos sumergimos en un mundo tridimensional en el que sentimos estar dentro de él y en el que podemos interactuar con todos los elementos que nos ofrece.
Sin embargo, como suele pasar con la tecnología, el origen del concepto metaverso comenzó con un relato de ciencia ficción. Snow Crash, un libro escrito en 1992 por el novelista estadounidense Neal Stephenson describió un entorno digital en tres dimensiones en el que las personas podían interactuar entre sí al que llamó “metaverso”.
La meta es el metaverso
Pero regresemos al presente. Hoy, el metaverso es tendencia. Mark Zuckerberg anunció fuertes inversiones en la infraestructura necesaria para su funcionamiento. Pero todavía resta ver si otras empresas se unen para crear las tecnologías que lo hagan posible.
Los especialistas pronostican que en menos de una década los metaversos serán el sitio elegido para trabajar, divertirse, conocer nuevas personas, viajar y descansar. Frente a este escenario, surgen interrogantes ¿Será este nuevo universo accesible para todos? ¿Habrá normas allí que regulen nuestro comportamiento cotidiano será un vale todo? ¿Terminará siendo un espacio que nos deshumanice y que ponga en riesgo nuestra privacidad? Estas son algunas de las cuestiones a las nos expondremos.
Después de todo ¿Quién tendrá la autoridad para decir que las experiencias en metaverso no son reales? Este nuevo universo comienza a meterse en nuestras vidas y nada parece poder detenerlo. De lo que sí estamos seguros en Kaiku Caffè Latte, es que apenas sea posible nos lanzaremos a la aventura virtual y llevaremos mucho café frío con nosotros.
